FUENTE DE LA PLAZA EL NEGRILLÓN
Habitante centenario de la Plaza al que vio nacer el Negrillón allá por el año 1900 según reza la inscripción de la propia fuente. Aunque hay quien dice que pudo estar construida antes del 1900. Y el caño ha sido testigo de la larga enfermedad del Negrillón así como su muerte definitiva. Igual que ha sido testigo del levantamiento del Negrillón metálico en memoria del desaparecido.
Con la compañía de la música producida por la caída del agua de sus caños ha tenido que seguir viviendo sin los avisos periódicos del Maragato en la Torre. Dejó hace tiempo de oír las campanadas y de ver los movimientos del Maragato.
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Foto subida a la red por Félix Garay - Pintura de Luis Menéndez Pidal de 1928
La Fuente, desde el momento de su nacimiento, ha sido testigo de la vida de Boñar. Su ubicación la ha hecho espectadora privilegiada del día a día y de los acontecimientos especiales de la villa y de las personas.
Fiestas, mercados... bautizos, comuniones, bodas, defunciones, gente al abrigo y cobijo del Negrillón, tristezas, alegrías...es lo que el caño ha visto y oído a lo largo de sus más de 100 años de existencia.
El conjunto de la fuente se asienta sobre algo más de 11 metros cuadrados y el pilón tiene una capacidad cercana a los 3,5 metros cúbicos. La profundidad media del pilón es de 40 centímetros. (Téngase en cuenta que la base tiene algo de inclinación). En el centro cuenta con un alto pedestal profusamente decorado que cuando menos podemos catalogar de muy singular.
Nos cuenta José Manuel Villa Revuelta: "Según el boca a boca de nuestros mayores, las piedras, tanto la que nos ocupa como las que se utilizaron para los pilones, fueron traídas de la cantera sin vaciar, se debieron de utilizar rodillos (troncos) para el desplazamiento, se decía que se rompieron unos cuantos yugos por el esfuerzo de las parejas de ganado que los transportaban".
Algunos de los detalles de este pedestal se pueden apreciar en la fotografías que se adjuntan. Siendo elementos acuáticos los motivos de la decoración.
Para finalizar la descripción de la fuente señalar la inscripción que tiene y que ya se hace difícil leer. Aportaciones de Manuel Ripado y Bruno Alonso me han llevado a reescribir la leyenda según se aprecia en las fotos .
Tendrán que plantearse las autoridades municipales si dejan que el paso del tiempo y sus inclemencias acaben con la posibilidad de poder la leer la inscripción. El año y quién posibilitó su existencia estaría bien poder mantenerlo en el recuerdo. No sé si se puede reescribir o igual se tenga que colocar una placa duradera ....
 
Sobre su descripción y construcción poco más que añadir, salvo que recientemente con motivo de la instalación del negrillón, recuerdo del que desapareció, se iluminó la fuente con un juego de de luces que cambian de color.
La fuente de la Plaza el Negrillón recibe su agua de una captación situada en la zona de Valles. (Consultar en el mapa de Boñar: marcador número 39 de color azul y blanco). Según informe de Jairo José Rodríguez Diez el depósito de esta captación tendría una capacidad aproximada de unos 10 metros cúbicos.
 El depósito es una construcción aparentemente sólida y en buen estado. Simplemente señalar que los alrededores bien limpios y despejado, su aspecto luciría más.
En cuanto al uso de su agua tenemos que decir que si nos remontamos a su instalación debió ser continuo y de distintas utilidades.
A principios del siglo XX no existiendo agua corriente en las casas hay que entender que todos los vecinos de sus alrededores se abastecían para el consumo diario del agua del caño. El ir y venir de baldes, calderos, cántaros, botijos ... debió ser incalculable; y muchos habrán sido los botijos que finalizaron su existencia en el ir y venir o en el propio caño.
Por otra parte, al igual que en el Cañín, las vacas de las cuadras vecinas se abrevarían en el pilón a la salida y vuelta a las cuadras. No se puede perder de vista que Boñar ha sido una localidad de gran importancia ganadera. Y a las vacas habrá que añadir las caballerías que los días de mercado se acercaban a la Plaza, lo que se puede apreciar en el cuadro del comienzo de esta entrada.
Hoy en día, a pesar de la existencia de agua en las casas, es frecuente ver a gente a coger agua con garrafas, botellas y como no con botijo; como el de Javi que casi todos los días cruza la calle para reponer y tener agua fresca en la farmacia. (Aunque hoy ha realizado un viaje a mayores para la foto).
De su agua puedo señalar que aunque se mantiene con generoso caudal he comprobado su variación con el paso del verano. En el mes de junio uno de sus grifos daba 8,5 l/minuto y el otro 15 l/minuto, lo que suponía un total de 23 l/minuto. A día 10 de agosto estos caudales se han reducido a 6 y 8,5 l/minuto lo que supone un total de 14,5 l/minuto. Y como se puede ver es una reducción considerable.
De su temperatura (me hace pensar que el termómetro no funciona muy bien) señalar que me parecen algo elevadas; siendo en junio de 15º y ahora en agosto de 17º. Seguiré haciendo comprobaciones y cambiando el termómetro. Si hay indicación de mediciones erróneas haré las correcciones oportunas.
Las mediciones de sus características (dureza, Ph, nitritos...) realizadas con tiras reactivas no me parecen muy fiables. Así que las dejaré aparcadas y cuando tenga una analítica de laboratorio la ofreceré.
A falta de más comentarios, o informaciones dejaremos El Caño con el deseo de poder seguir disfrutando de su presencia en buen estado y de su caudal de agua.  La foto adjunta, enviada por Carmen Dosantos, (¿principios del siglo XX? vendría a indicar que el remate del pedestal del centro del caño no estaría rematado como lo vemos en la actualidad. Los cisnes de la parte superior no sería la cumbre del pedestal. |
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